Hay veces que una llamada te descoloca. Algo que habías dejado atrás vuelve a tu vida para que no se te olvide que el destino es caprichoso y tú estás en mitad de esta ruta inescrutable. Quizá el secreto está en no esperar reacciones inmediatas. Es inútil porque no dependen de uno mismo. Lo malo es cuando todos aguardamos el movimiento ajeno porque, entonces, sólo se produce la calma absoluta. Espiral pasiva en la que tantas veces nos encontramos.
María La Portuguesa - Marazu
Hace 11 horas
1 comentario:
Esto no puede ser,no no!! Temazo del Señor Chaouen y sin ningún comentario...Por favor!!8).
Ya me voy que estoy un poco pasado de vueltas...
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