Coti- Canción de adiós

Normalmente, uno busca --aunque sea de forma inconsciente-- canciones con las que se identifique en ese momento. Pero otras veces, el replay funciona por puro placer. Y es lo que me pasa estos días, en los que no dejo de escuchar esta canción de Coti. Lo más extraño es que nunca me había enganchado ni este tema ni su autor hasta que el otro día fui a un concierto suyo. Y qué bien sonaba esta "Canción de adiós" en vivo. Me gustan las canciones tristes con un toque de resignación. Ojalá pudiera decir adiós de la misma manera elegante que lo hace Coti. Después del argentino, tengo cita con un catalán. El martes se viene Rafa Pons, una visita tan emocionante como inesperada. Cómo me está gustando esta primavera.

Paco Bello- Hola, tú

Pues eso, hola, que ya era hora. Han sido más de dos meses desaparecida por estos lares. Tiempo de cambios, casi todos buenos. Ahora, más que nunca, tengo ganas de buscar nuevas canciones y rescatar de mi memoria aquellas que me han acompañado. Contenta de regresar a este rincón tan querido que tengo tan descuidado.

Rafa Pons- Rompiendo el hielo

A mí escuchar a Rafa Pons me da buen rollo, que queréis que os diga. Es poner una canción de este hombre y dibujarse una sonrisa en mi boca. Este mes empieza la primavera, así que es más fácil que despierte el buen humor por las mañanas. Rompiendo el hielo, como dice Rafa, suele ser algo complicado porque esa frialdad inicial permanece, en muchas ocasiones, más de lo que debiera. Pero ahora llega el sol, que derrite los bloques más contundentes. Ya sé que tengo pendiente una crónica del concierto de Chaouen. Estoy esperando a encontrar las palabras adecuadas para describir, aunque sea de lejos, esa noche tan especial.

El repertorio fue inmejorable. "Pintando el cielo", "Días azules", "Flores secas", "Vente", "Flor de bulevar" y "Privado" fueron algunas de las joyas que Carlos nos regaló. Repitió varias veces que hacía mucho tiempo que no tocaba solo, sin el respaldo de su banda. Fue una actuación íntima y muy especial. Con cada canción, un vuelco al corazón. Al día siguiente, una sonrisa de oreja a oreja, melodías en mi cabeza y un "tú eres la única persona con alma" en el corazón.



P.D.: Vanessa, tenías que haber venido. Fue genial. Ya sabes, tienes un regreso pendiente ;)

Carlos Chaouen- La vida tiene estas cosas

Hoy el título de la canción viene que ni pintado a este post. Cosas de la vida son las que me apartan de mi querido blog y de las bitácoras amigas, aunque ésas las sigo a menudo aunque no deje rastro. Cosas de la vida que, en este caso, son buenas. Y nuevas e inesperadas. Precisamente, en este trocito virtual en el que proyecto lo que ronda por mi cabeza hay una constante: el deseo de ver a Chaouen en directo. Ya son incontables las veces en las que la agenda se ha puesto en mi contra y me ha impedido ir a un concierto del maestro. Y hoy, por fin, puedo decir que voy a sumergirme en el directo del gaditano.

El cometa Lulin deja su estela estos días sobre España y Chaouen dejará la suya en mi universo particular. Y sé que me entra la vena sentimental, pero es que días así no se viven a menudo. Es que épocas tan intensas no ocurren en cada estación. Y hay semanas que, sin fiestas, son las mejores del calendario.

Phil Lynott- Old town

Estos días no me salen las palabras porque la velocidad a la que se suceden los acontecimientos me enmudece. Muchos cambios de golpe, buenos y malos. Pero me quedo con los primeros, que superan con creces a los segundos. Nunca hubiera imaginado que una ola de frío pudiera traer tanto calor consigo. Del bueno, del que no quema sino que reconforta. Llevo días a vueltas con esta canción. Me encanta. Por muchas razones.

Los Piratas- El equilibrio es imposible

Hay momentos en los que tu mundo particular se cae a pedazos. La rutina estalla en miles de trocitos que se dispersan en todas direcciones. Incluso en las peores catástrofes, uno siempre tiene algo a lo que aferrarse. Y puede que haga falta que la tierra que está bajo tus pies se remueva para darte cuenta de que las cosas más importantes de la vida son inamovibles. O puede que el destino se saque un as de la manga y te dé un bonus de fuerza, como si de un videojuego se tratase.

Hace unos días recordaba aquí eso que dice Chaouen en su último disco: De todos los giros del mundo hay modos de ser equilibrio y hoy pienso más que nunca que no se equivocaba. Ahora que vivo en un giro constante y bastante caótico, he encontrado mi equilibrio. Siento contradecir a Los Piratas, pero sí es posible.

Kiko Veneno- Memphis blues

Un grande versioneando a otro maestro. O lo que es lo mismo, Boy Dylan pasado por el tamiz de Kiko Veneno. Un canción buenrollera donde las haya que, con este frío polar, hace falta. Y si no calienta las manos, al menos sí los ánimos. A pesar de esta canción aflamencá de Kiko Veneno, llega el 2009 con una vuelta a los sonidos más rockeros. Y me está gustando esto de retomar viejos sonidos que tenía un poco aparcados y tanto me han acompañado. Supongo que es la influencia del entorno que, además de traer a mi cabeza canciones que casi se habían perdido en mi memoria, estimula mi buen humor. En mitad de una tempestad de tinta, a mí me da por inyectarme una sobredosis de música. Y así, con las mentes preclaras en contra y las cartas que no terminan de caer sobre la mesa, no me olvido de sonreír un par de veces al día.

Carlos Chaouen- Equilibrio

Ya se ha consumido el primer día del 2009. Me he negado a hacer una lista de propósitos para el flamante año, pero lo que tengo claro es que trataré de buscar ese equilibrio del que habla Chaouen en esta canción. De todos los giros del mundo hay modos de ser equilibrio canta el gaditano y, para mí, las cosas que dice este señor tienen toda la autoridad del mundo. Así que de este año espero eso, encontrar mi balanza personal y darle continuidad a todo lo bueno del 2008. Y, por supuesto, cerrar círculos y puertas, como dice Coelho. Cortar conexiones equivocadas y no volver a tomar los caminos que no llevan a ningún sitio. Un 2009 lleno de música, de reencontrarme con viejos amigos, consolidar relaciones y conocer nuevos rostros. Será un año diferente, sin duda, y con la emoción de la incertidumbre me quedo. Feliz año para todos.